Factores que afectan la salud de los niños: obesidad, ansiedad y desinformación digital

La infancia y la adolescencia son etapas cruciales en el desarrollo humano, pero hoy enfrentan desafíos que pueden marcar el futuro de una generación. Un informe reciente de la Comisión The Lancet destaca la creciente amenaza de la obesidad, los problemas de salud mental y la desinformación digital que afecta a millones de jóvenes. La situación exige una respuesta inmediata y efectiva por parte de todos los sectores de la sociedad.

Este informe no solo presenta datos alarmantes, sino que también llama a la acción colectiva para proteger el bienestar de nuestros adolescentes. La salud y el futuro de la próxima generación dependen de nuestro compromiso y de las decisiones que tomemos hoy.

Conclusiones alarmantes del informe de la Comisión The Lancet

El informe titulado A call to action: the second Lancet Commission on adolescent health and wellbeing, publicado el 20 de mayo de 2025, es una revisión crítica de la primera comisión de 2016. Su contenido se basa en análisis globales, estudios longitudinales y consultas con 122 jóvenes de todo el mundo.

Una de las grandes aportaciones del informe es el uso de datos del estudio Global Burden of Disease (GBD), estimaciones de UNICEF y la OMS, además de herramientas conceptuales que permiten evaluar el impacto de factores como el cambio climático y la desigualdad digital.

Las proyecciones para 2030 son preocupantes: si no se toman medidas estructurales, al menos la mitad de los adolescentes en el mundo vivirán en países donde la carga de enfermedades físicas y mentales será abrumadora.

Las conclusiones del informe reflejan la gravedad de la situación y la necesidad de actuar de inmediato. A continuación, se presentan los puntos más destacados:

1. Obesidad creciente en todas las regiones

Se estima que para 2030, el 30% de los adolescentes en América Latina, Oriente Medio y países desarrollados serán obesos. Esta preocupante tendencia está relacionada con hábitos alimentarios poco saludables y un estilo de vida sedentario.

Algunas de las causas que contribuyen a este aumento en la obesidad incluyen:

• Consumo excesivo de bebidas azucaradas.
• Predominio de la comida ultraprocesada.
• Reducción de la actividad física debido al sedentarismo digital.

Los padres y cuidadores deben revisar los hábitos alimentarios familiares y promover un estilo de vida más activo.

2. Salud mental en retroceso

Los datos indican que tres de cada cuatro trastornos mentales comienzan antes de los 24 años. La próxima década será crítica, ya que se estima que 42 millones de años de vida saludable se perderán debido a problemas como la depresión y la ansiedad, afectando especialmente a niñas y adolescentes mujeres.

Es esencial que las escuelas y comunidades implementen estrategias para apoyar la salud emocional de los jóvenes, fomentando un ambiente que evite la medicalización excesiva y el estigma.

3. Uso nocivo y desregulado de internet

La nueva generación de adolescentes está expuesta a un entorno digital poco regulado. La constante interacción con redes sociales y la exposición a contenido tóxico (como proanorexia y violencia) tiene un impacto directo en su salud mental y emocional.

Por ello, es crucial que las familias adopten un enfoque de alfabetización digital, que permita a los jóvenes navegar de manera segura por el mundo en línea.

Factores que han incrementado el sobrepeso y la obesidad en la población infantil

La obesidad infantil es un problema global que ha ido en aumento durante las últimas décadas. Algunas de las causas más relevantes son:

• Cambio en los hábitos alimenticios: La disponibilidad de alimentos ultraprocesados y bebidas azucaradas ha incrementado, sustituyendo comidas caseras y saludables.
• Estilo de vida sedentario: La proliferación de dispositivos electrónicos ha reducido la actividad física entre los jóvenes.
• Influencia de las redes sociales: La presión por seguir estándares de belleza poco realistas puede fomentar hábitos alimenticios poco saludables.

Es fundamental abordar estas cuestiones desde la educación y la concienciación para revertir la tendencia actual.

Factores familiares que pueden aumentar el riesgo de obesidad en los hijos

El entorno familiar juega un papel crucial en la formación de hábitos saludables. Algunos de los factores que pueden aumentar el riesgo de obesidad en los hijos incluyen:

• Estilo de vida sedentario: Si los padres llevan una vida sedentaria, es probable que los hijos también adopten estos hábitos.
• Nutrición inadecuada: La falta de educación sobre alimentación saludable puede llevar a que los niños consuman alimentos poco nutritivos.
• Falta de tiempo para actividades físicas: La falta de tiempo para realizar actividades en familia puede contribuir a un estilo de vida inactivo.

Los padres deben ser un modelo a seguir y fomentar hábitos saludables desde la infancia para prevenir la obesidad en sus hijos.

Problemas de salud causados por la obesidad en los niños

La obesidad infantil puede dar lugar a una serie de problemas de salud, que incluyen:

• Diabetes tipo 2: Cada vez más niños y adolescentes son diagnosticados con esta enfermedad, que antes era exclusiva de adultos.
• Enfermedades cardiovasculares: La obesidad puede aumentar el riesgo de hipertensión y enfermedades del corazón.
• Problemas ortopédicos: El exceso de peso puede causar problemas en las articulaciones y dificultades para moverse.

La prevención y el tratamiento de la obesidad son esenciales para garantizar un futuro más saludable para los niños.

Cómo afecta psicológicamente la obesidad en los niños

La obesidad no solo tiene consecuencias físicas, sino que también puede afectar profundamente la salud mental de los niños. Algunos de los efectos psicológicos incluyen:

• Baja autoestima: La presión social y los estándares de belleza pueden llevar a los niños a sentirse inadecuados o poco atractivos.
• Trastornos de ansiedad y depresión: La estigmatización y el bullying suelen estar asociados a la obesidad infantil.
• Aislamiento social: Los niños con sobrepeso pueden evitar actividades sociales por miedo a ser juzgados.

Es vital que se implementen programas de apoyo emocional en las escuelas y comunidades para ayudar a los niños que enfrentan estas dificultades.

Propuesta de acciones a corto plazo

El informe de la Comisión The Lancet no solo presenta un diagnóstico crítico, sino que también sugiere acciones concretas para abordar estas problemáticas. Algunas de las propuestas incluyen:

• Inversión en políticas multisectoriales: Es necesario unir esfuerzos entre salud y educación para crear un entorno de apoyo.
• Acceso universal a servicios para adolescentes: Garantizar que todos los jóvenes tengan acceso a atención médica y recursos educativos.
• Entornos escolares seguros: Crear espacios donde los jóvenes se sientan protegidos y apoyados en su desarrollo emocional y físico.

La salud de nuestros hijos depende de cómo abordemos sus necesidades y de cómo fomentemos un entorno positivo en sus vidas.

Referencias

• Sarah Baird, Shakira Choonara, Peter S Azzopardi et al. A call to action: the second Lancet Commission on adolescent health and wellbeing. The Lancet Commissions. May 20, 2025. DOI: 10.1016/S0140-6736(25)00503-3

Para profundizar en el tema de la salud de los adolescentes y la importancia de un enfoque integral, puedes ver el siguiente video que aborda la alimentación saludable para nuestros niños:

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