La relación entre abuelos y nietos se ha transformado drásticamente en la era digital. Si bien tradicionalmente imaginamos a los abuelos contando cuentos o llevando a sus nietos al parque, un nuevo estudio revela que la realidad es bastante diferente. En este artículo, exploramos las dinámicas del cuidado intergeneracional y cómo las pantallas se han convertido en protagonistas en el día a día familiar.
La investigación de la Universidad de Arizona brinda una perspectiva fresca sobre la crianza moderna, destacando el uso de dispositivos digitales en la interacción entre abuelos y nietos. Este fenómeno, aunque sorprendente, plantea importantes preguntas sobre el impacto de la tecnología en la educación y el desarrollo infantil.
El uso de pantallas: casi tres horas de interacción digital
El estudio analizó a 350 abuelos estadounidenses que cuidan de sus nietos al menos tres veces al mes. Estos abuelos, con una media de edad de 55 años, supervisaban a niños de entre 2 y 10 años. En promedio, los niños pasaban casi tres horas frente a pantallas durante un tiempo compartido de siete horas. Este tiempo se distribuía de la siguiente manera:
- Casi dos horas viendo televisión.
- Aproximadamente una hora jugando videojuegos o usando aplicaciones.
Esta tendencia no se debe a un simple descuido. Los investigadores descubrieron que el uso de pantallas está profundamente influenciado por la familiaridad que cada abuelo tiene con la tecnología. En este sentido, la confianza digital se convierte en un factor determinante en la mediación que ofrecen a sus nietos.
Los abuelos modernos no son los mismos que hace unas décadas. Muchos continúan activos laboralmente y han experimentado la transición digital, aunque no todos lo han hecho con el mismo éxito. Esta brecha tecnológica afecta la manera en que gestionan el tiempo de pantalla de sus nietos, y sus enfoques pueden variar significativamente:
- Abuelos tech-savvy: Utilizan estrategias como el diálogo y la co-visualización.
- Abuelos menos familiarizados: Pueden imponer restricciones severas, limitando el tiempo frente a pantallas o incluso prohibiendo ciertos contenidos.
Este último enfoque, aunque común, no siempre resulta efectivo. Los niños que tienen una mediación más abierta tienden a desarrollar una mayor conciencia crítica sobre el contenido que consumen.
Influencia de las creencias en el uso digital
Otro hallazgo importante del estudio es que las creencias personales de los abuelos sobre los medios digitales afectan no solo el tiempo de pantalla permitido, sino también su relación con los padres de los niños. Aquellos con una visión negativa sobre la tecnología tienden a tener más desacuerdos con los padres, lo que puede impactar negativamente en la dinámica familiar.
Por el contrario, los abuelos que mantienen una perspectiva equilibrada, reconociendo tanto los riesgos como las oportunidades que ofrecen los medios digitales, suelen reportar relaciones más satisfactorias con los padres. Esto indica que el debate sobre el uso de pantallas es tanto técnico como emocional y generacional.
El rol de los abuelos varones en la crianza digital
Un aspecto menos explorado en estudios previos es el rol de los abuelos varones en la supervisión del tiempo de pantalla. Según el estudio, estos abuelos son generalmente menos activos en esta área en comparación con las abuelas. Sin embargo, hay una excepción: aquellos con mayor competencia tecnológica tienden a involucrarse más en la crianza digital, a veces superando a las abuelas en este contexto.
Esto nos invita a replantear la imagen tradicional del abuelo como una figura secundaria en el cuidado. Con las herramientas adecuadas, su rol puede ser más activo incluso en áreas que tradicionalmente se han asociado a las mujeres en la crianza. Algunas estrategias que utilizan incluyen:
- Supervisión: Observar lo que el niño está viendo sin intervenir.
- Restricción: Limitar el tiempo de uso o el tipo de contenido que se puede consumir.
- Instrucción: Acompañar al niño explicándole lo que ve.
- Co-uso: Compartir el momento de consumo, ya sea viendo juntos o jugando.
A pesar de que el co-uso es la estrategia menos utilizada, los expertos destacan que es una de las más valiosas para fomentar un vínculo afectivo más profundo y una comprensión crítica del entorno digital.
Redefiniendo la relación familiar en la era digital
Lo que este estudio pone de manifiesto no es solo una estadística preocupante, sino una invitación a replantear los vínculos familiares desde una perspectiva intergeneracional. En un mundo donde las pantallas son omnipresentes, los abuelos no pueden quedar al margen del debate sobre la crianza digital. Al ser cuidadores regulares, tienen un papel crucial que desempeñar.
Para afrontar este desafío, es esencial incorporar formación digital adaptada a los abuelos, promover espacios de diálogo entre las generaciones y reconocer el valor de su experiencia. La clave no está en eliminar las pantallas, sino en aprender a gestionarlas con sentido común, afecto y responsabilidad.
Referencias
- Cecilia Sada Garibay et al, Grandparents and children's media use in the USA: Screen time, mediation practices, and relationship outcomes, Journal of Children and Media (2025). DOI: 10.1080/17482798.2025.2480088
Para profundizar en este tema, te invitamos a ver el siguiente video que aborda cómo los abuelos pueden adaptarse a las nuevas tecnologías y su rol en la crianza moderna:
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